lunes, 18 de mayo de 2009

Artesanía de Talagante


Ciudad de larga tradición alfarera, Talagante ubicada a 35 KM de Santiago, es la cuna de una cerámica tipica, producto de una sola familia (Díaz Jorquera), que se h preocupado de transmitirla de madre a hijas.

Son caracteristicas de esta cerámica policromada las figuras de tamaño pequeño (20 centimetros) de carácter costumbrista y religioso. En ella se ha mantenido por años los mismos procedimientos de fabricación. La única variante que se ha presentado con el tiempo ha sido la pintura que en ella se utiliza, que antiguamente era fabricada por las mismas artesanas y que hoy es de tipo industrial. Como materias se usan la greda y la arena. Como herramientas las manos.

Las piezas producidas son obras de carácter escultórico, que reproducen tipos y costumbres populares de tamaño pequeño y de colores muy vivos. Ejemplo tipicos personajes como el cuasimodo, la fonda y la lavandera.

Inspiración de esta cerámica


Proviene de una base popular, el pueblo y sus costumbres, trabajos e inquietudes el que sirve de modelo. Podemos decir también que, al igual que en otras manifestaciones del folklore, como la poesía y el canto se pueden distinguir piezas inspiradas y relacionadas con lo "divino" y lo "humano", como el Cuasimodo, El Confesionarios, la Fonda, la Topeadura y el Tornillero.

Las caracteristica primordial de narratividad de la cerámica de Talagante, proviene también la sencillez elemental de sus piezas, lo que permite una generalización de las características más sobresalientes de los tipos interpretados, condensando un conocimiento de lo chileno no por el tema y su interpretación, sino por su esencia misma, lo que demuestra el agudo sentido de observación de las loceras.

Estilo de la Artesanía




El estilo de la arteanía de Talagante de acuerdo con el contenido de sus temas, se puede entender como "contar un cuento de greda", expresión que se aplica en lo argumental y lo formal.


La ornamentación se basa principalmente en la línea y el color. El empleo de la primera desemboca en dos resultados; uno mesurado y geometrizante propia de la cestería general de la cruz o de las botellas de vidrio con capas superpuestas de tierra; otro ampuloso, denso y dinámico aunque sin abandonar la continuidad y el orden de secuencias en su ocupación del espacio visible en los estribos de gran factura.

Historia de la Cerámica


En la ciudad de Talagante, y en fechas del siglo XIX que no se han podido precisar con exactitud, comenzó a aparecer una cerámica policromada que perdura hasta el día de hoy, y que al igual que la cerámica de las Monjas Claras y la de las Hermanas Gutierrez es un sello característico y diminutivo.


La cerámica en Talagante, es producto del trabajo de una sola familia (Díaz Jorquera), que en la actualidad se ha ido traspasando a otras generaciones a través de un Taller realizado el año 2004 por la Fundación Prodemu a mujeres de la Comuna.